FILARIAS

 

UNA ENFERMEDAD QUE AFECTA AL CORAZÓN:

 DIROFILARIAS INMITIS.

 

 

La Filariosis una enfermedad importante que debemos prevenir en nuestros perros, ya que puede causar la muerte del animal, sí no la detectamos y tratamos a tiempo.

Decimos que es importante en perros, porque aunque la especie felina puede afectarse, esta no es un hospedador apropiado, por lo cual esta enfermedad no es mortal para ellos.

Se trata de una enfermedad que se produce en zona de climas tropicales y templados (como ocurre en las Islas Canarias).

Afecta a cualquier raza de perro, sexo y edad, y tienen un mayor riesgo aquellos animales que viven en el exterior de la casa (jardines, terrazas, etc...). El hecho de tener mayor o menor cantidad de pelaje no influye en el riesgo de ser infectados.

Esta enfermedad se transmite a través de mosquitos y no por contacto directo entre un animal enfermo y uno sano. El mosquito hace de hospedador intermediario entre ambos animales (el enfermo y el sano). Y no sólo se trata de un mosquito, se han hecho estudios donde se han demostrado que existen una amplia gama de especies de mosquitos que pueden transmitir la enfermedad.

La transmisión de la Dirofilariosis se produce porque un mosquito pica a un  perro afectado por la enfermedad, donde en su sangre circula larvas en fase 1 de filarias, las cuales se introducen dentro del mosquito al chuparle su sangre; dentro del mosquito esas larvas en fase 1 se transforman en larvas en fase 2, para posteriormente convertirse en larvas en fase 3, y una vez que el mosquito pique a un animal sano le inocule, por medio de su saliva, las larvas en fase 3 al nuevo hospedador, donde estas larvas van atravesando los distintos tejidos y vasos sanguíneos del animal en dirección al corazón y es a lo largo de ese recorrido, donde las larvas se evolucionan a larva 4 y a larva 5 y cuando llegan al  corazón se convierten en adultas, lugar donde se reproducen y las filarias adultas hembras liberan a la circulación sanguínea larvas en fase 1, las cuales no progresaran hacia nuevas fases larvarias si no son introducidas en un mosquito.

 

 

La cantidad de parásitos (gusanos) que afecta al corazón de los gatos es mucho menor y duran menor tiempo vivos en ellos, por tanto, en la mayoría de los casos la infestación pasa sin causar problemas clínicos evidentes.

Aún así es apropiado prevenir esta enfermedad también en gatos, pues se han dado casos (en un bajo porcentaje) en que la carga parasitaria es suficiente para producir consecuencias graves y complicadas de resolver.

 

La gran mayoría de los perros afectados son asintomáticos cuando se encuentran en las fases tempranas de la enfermedad y conforme va transcurriendo el tiempo, comienzan a aparecer los primeros síntomas, entre ellos, los más característicos, por lo cual, los dueños llevan a su perro al veterinario son:

  •  Cansancio, fatiga; sobre todo con el ejercicio.
  •  Tos.
  •  Pérdida de peso.

Cuando la enfermedad está bastante avanzada:

  •  Hemoptisis (salida de sangre por la nariz).
  •  Ascitis (acumulación de líquido en el abdomen).ç
  •  Anemia, notamos las mucosas pálidas.
  •  Dificultad para respirar.

Y cuando la enfermedad está muy avanzada, no sólo se ve afectado el corazón y el pulmón, hay otros órganos que también empiezan a verse alterados, como son los riñones y el hígado.

El diagnóstico de la enfermedad se realiza por medio de un test específico, rápido de hacer y de obtener los resultados y muy fiable; este detecta antígenos de filarias en sangre. Este test se puede realizar en cualquier clínica veterinaria.

También existen otros métodos de diagnóstico, cómo es el test de Knott o la prueba de la gota gruesa, quizás sean más económicos  pero son más laboriosos y algunos de ellos son menos fiables.

En caso de que nuestro animal haya dado positivo al test y decidamos ponerle un tratamiento, es aconsejable realizar unas pruebas previas, es decir necesitamos hacer unas radiografías y/o ecocardiografía y analítica de sangre completa, con la finalidad de obtener una mayor información del estado en que se encuentra nuestro perrito y cuál es el tratamiento y cuidados más adecuado para cada situación.

La mejor manera de evitar que tu animal se enferme es previniendo y afortunadamente existe en el mercado una amplia gama de productos que se pueden utilizar, siendo 100% eficaces, sí se utilizan correctamente.

Tu veterinario te informará de cuál es el mejor método de prevención para tu animal, pero decir que hay comprimidos, tabletas masticables, pipetas spot-on que se administran mensualmente, comenzándolas a usar como edad media a partir de las 6-8 semanas de vida del animal. También existe cómo método de prevención una inyección que se aplica anualmente.

En cuanto al tratamiento, hay que explicar que en función de la localización de las filarias y el estado en el que se encuntra nuestro perro, datos que sabremos a partir de los resultados obtenidos en las pruebas diagnósticas comentadas anteriormente , se tomará una pauta u otra.

Básicamente consistirá en mantener al animal en REPOSO ABSOLUTO (llegando a permanecer en un jaula, sí está muy afectado, para que se mueva lo menos posible y así evitar efectos secundarios en la mayor posibilidad). Y en la aplicación de un TRATAMIENTO SINTOMÁTICO en caso que sea necesario, el veterinario pautará que medicamentos habrá de tomar para mejorar los síntomas. Y se finalizará con un ADULTICIDA que puede ser vía oral, intramuscular o quirúrgico.